ALCORISA
Descripción
Portal del Maestrazgo y Bajo Aragón, a Alcorisa la cruza el río Guadalopillo y la riegan las aguas que embalsa el pantano de Gallipuén.
Testigo del paso de los iberos es el Cabezo de la Guardia, poblado declarado Bien de Interés Cultural, y de cuyos restos se extrajo el Kalathos, pieza de cerámica de incalculable valor.
Alcorisa conserva el sabor de lo añejo en cada rincón de su casco urbano, trazo del medievo, con calles estrechas de inviernos silenciosos y risueños estíos. Sus casas preservan la frescura y el calor humano que dan cobijo al caminante, el mismo que encuentra el sosiego del camino del Calvario, con su serpenteante subida y hermosos recovecos que animan a descansar en los calurosos días del verano a todos los fieles que con gran devoción suben a rezar al Cristo del Sepulcro Glorioso, entonando una apagada oración en sus catorce estaciones y que sacia su sed en el agua del pozo existente en su cima.
Alcorisa es cruce de caminos, quiere ser crisol de comarcas, de gentes, de sentimientos, y por todo ello recibe al visitante con su monumento al Tambor y Bombo, símbolo de la tradición y el arraigo, claro testimonio de la ilusión y el empuje con el que las gentes de este pueblo afrontan el tránsito hacia el mañana.
En la orilla izquierda del Guadalopillo encontramos la Iglesia de San Pascual y el antiguo Convento de los Padres Alcatarinos. Al otro lado del río, se encuentra la Iglesia de San Sebastián, (siglo XVIII), que alberga el Centro de Interpretación de la Semana Santa con las restauradas pinturas de las cúpulas sobre el martirio de San Sebastián, sus magníficas Salas de Exposiciones, y los Pasos de las Cofradías, que allí esperan, junto con los tambores y bombos, la llegada de la Semana Santa.
Mención especial tiene la Iglesia de Santa María la Mayor, (s. XVII) recientemente restaurada, con su torre mudéjar que se erige majestuosa sobre todo el pueblo, amparada por la Peña de San Juan y por el Monte Calvario donde se encuentran las ermitas de San Juan y del Santo Sepulcro (s. XVI), lugar de devoción para alcorisanos y visitantes.
Este paraje es el principal eje de las tradiciones del pueblo y el protagonista de excepción al llegar la Semana Santa, cuando ejerce de escenario para la representación del Drama de la Cruz.
Gastronomía
Judías con chorizo y morro, magras con tomate, conejo, ternasco, los diversos embutidos del cerdo, y el típico "fulladre" (bollo con tomate y pimiento).
De las pastas destacan los "Misterios", y las "Tortas de Alma" rellenas de cabello de ángel.
De entre los dulces, la "Cazuela de Reyes" (guirlache en forma de olla rellena de bizcocho borracho y merengue) y las "Piedrecicas del Calvario" (guirlache con almendras enteras forradas de chocolate con leche).
El municipio forma parte de la zona de producción de tres productos que sobresalen por su calidad: el Melocotón, el Jamón y el Aceite de Oliva Virgen Extra.
Semana Santa
De 1550 son las primeras referencias sobre la Cofradía de la Sangre de Cristo, decana de la localidad y salvaguarda de la tradición junto los Guardias Romanos, que han velado desde antaño el Monumento al Santísimo. Éstos irrumpen en la iglesia cada Jueves Santo, al finalizar los Santos Oficios, golpeando con sus lanzas en las mismas entrañas de la tierra, resultando uno de los momentos más sobrecogedores y emotivos. Desde este momento, guardarán el templo hasta la Procesión del Santo Entierro. Las matracas (en sustitución de las campanas) llamarán desde lo alto de la Iglesia con su sonido de luto a todos los fieles a los diferentes actos y procesiones.
El momento culminante de los tambores y bombos se produce a las doce de la noche del Jueves Santo cuando, al Romper la Hora en la Plaza del Ayuntamiento, cientos de tambores y bombos comienzan a sonar al unísono provocando un estruendo tan estremecedor que parece que el mundo se vaya a venir abajo.
En Viernes Santo, las túnicas moradas dejan paso al mosaico de colores y gentes que participan en el Drama de la Cruz en el Monte Calvario. Más de trescientas personas representarán con fidelidad los últimos días de la vida de Cristo, ante el asombro de miles de visitantes que contemplarán apasionados la belleza de una representación que culmina cuando, crucificado por su propio destino, un hombre exhale su último suspiro.
En ese momento, los tambores, bombos y penitentes con sus correspondientes cofradías y pasos, vuelven a las calles tiñéndolas de color morado para acompañar, durante la Procesión del Santo Entierro, al cuerpo de Cristo en su lecho. Los guardias romanos saldrán del Monumento para escoltar a La Santa Cama como se ha hecho desde tiempo inmemorial, al igual que la figura del Longinos y su "Criadico", que ejerce de lazarillo de quien perdió la vista por atravesar con su lanza el costado de Cristo.
Al final, con el silencio, todas las túnicas, galas e instrumentos volverán a los armarios y los Pasos con sus Imágenes reposarán en el Museo de la Semana Santa; el Calvario volverá a ser lugar de silencio, peregrinación y Vía Crucis; nuestros visitantes volverán a sus lugares de origen, pero los alcorisanos nos estaremos preparando para, al año siguiente, volver a reencontrarnos con nuestras tradiciones.
Alcorisa pertenece a la Ruta del Tambor y Bombo y su Semana Santa está declarada de Interés Turístico Nacional.
A las ocho de la tarde se produce el pregón que da comienzo a la Semana Santa Alcorisana, con la proclamación del Tambor de Honor. Cuando está a punto de finalizar, el Grupo de Tambores y Bombos de Alcorisa rompe el silencio con el estruendo de sus instrumentos.
A las doce del mediodía se celebra la Procesión de la Entrada de Jerusalén, acompañada por el sonido de los tambores y los bombos. Después, hacia las cuatro de la tarde, comienza el Vía Crucis al Calvario y, una hora más tarde, la Exhibición Local de Tambores y Bombos, en la que se reúnen los tamborileros de todas las cofradías. Hacia las ocho de la tarde comienza la procesión del Encuentro, en la que se cruzan las imágenes de Jesús Nazareno y la Virgen de los Dolores.
A las nueve de la noche tiene lugar la Subida de las Imágenes desde la iglesia de San Sebastián hasta la de Santa María la Mayor. Todas las cofradías excepto la de San Juan llevan un toque exclusivo de esta procesión.
A las seis de la tarde tienen lugar los Santos Oficios en la Parroquia, que finaliza con la entrada de los Guardias de Semana Santa. Hacia las ocho es el turno de la Procesión de la Pasión. A medianoche tiene lugar la tradicional Rompida de la Hora, en la que los tamborileros llenan las calles con el estruendo de los tambores.
A las doce del mediodía, los toques del tambor cesan para dar paso a la Procesión del Pregón, que finaliza en la Plaza del Ayuntamiento hora y media más tarde, con la Concentración de Tambores y Bombos. El sonido de los tambores y bombos volverá a cesar media hora más tarde. Después, por la tarde, tiene lugar la representación del \"Dramade la Cruz\" en el monte Calvario y, a las nueve de la noche, la procesión del Santo Entierro.
Fiestas Recomendadas
Fiestas de Sam Sebastián: Son las fiestas patronales de Alcorisa. El evento más destacado de estas fiestas es la Semana Cultural.
Fecha: 20 de Enero.
Fiestas de Primavera: Se celebran con una comida de hermandad y encierros con vaquillas.
Fecha: 1 de Mayo.
Fiestas de la Exaltación de la Santa Cruz y de Nuestro Señor del Sepulcro Glorioso: Son las fiestas mayores de Alcorisa. Destacan las comparsas de Gigantes y Cabezudos, las comidas populares, las verbenas y diversos torneos.
Fecha: Segunda semana de Septiembre.
Celevración del IV Centenario: Conmemora la fundación de Alcorisa como villa, después de independizarse de la encomienda de Alcañiz en 1605.
Fecha: 9 de Noviembre de los años impares.